Siempre me he preguntado por qué será que por lo regular es el  ciudadano común quien se da cuenta de en dónde están los males en  cuestión de los embotellamientos en el tránsito vehicular. O será que  los agentes viales tienen otras prioridades u otras instrucciones en  cuanto a los camiones del Servicio de Transporte Urbano (STU) se  refiere, porque para la mayor parte de la ciudadanía ha quedado claro  que la causa para que el centro de la ciudad esté tan congestionado, son  los camiones y combis del STU.
Son aproximadamente las 16:25  horas de este pasado viernes 29 de septiembre, al lado de la acera norte  de la calle Hidalgo están dos camiones y dos combis estacionados, sin  moverse y sin subir ni bajar pasaje. Llega otra camión más que acaba de  dar vuelta por la calle San Luis y se pone detrás de los que ya están  ahí, y otros dos camiones más se acercan por la misma Hidalgo al cruce  de la calle Zacatecas y se atoran al llegar a esta porque están ahí  otras combis bloqueando el crucero y a pesar de estar en verde el  semáforo de la avenida México, la fila que está por la Hidalgo no avanza  porque dicha calle entre Veracruz y México está llena de vehículos de  todo tipo.
Está una mujer agente vial en la esquina de Zacatecas y  Lerdo y está un camión de la ruta Jazmines a media cuadra de la  Plazuela Antigua y libre lo que resta hacia la calle Lerdo; y no se  mueve el camión a pesar de que no están subiendo ni bajando de dicha  unidad que es la 389. Atrás de esta unidad están dos combis que le pitan  el claxon al de la ruta Jazmines y sigue sin moverse. Me le quedo  mirando a la agente vial y ella como que se da cuenta cuál es mi  intención al estar observando la situación, porque voltea a ver al  camión que está a media cuadra pero no le dice nada ni le hace  señalamientos ni le llama la atención con su silbato. La combi que está  más atrás se vira hacia la izquierda, se salta las bollas que delimitan  el carril para los camiones y se va. La muchacha policía vial sigue sin  moverse de la esquina y ya pasó casi un minuto en que el camión 389 de  la ruta Jazmines no se mueve de su lugar y ya llegó otra combi y el  camión ruta Progreso 5 número económico16.
Me decido atravesar  la Zacatecas para preguntarle a la señorita de vialidad por qué no le  dice nada al camionero, pero como que si adivinó mi intención y ella  camina hacia donde está el camión ruta Jazmines, y cuando va llegando a  la puerta de la unidad el camión arranca lentamente, pero de todos modos  ya no le digo nada a la muchacha empleada de Tránsito Municipal porque  mido las posibilidades de un conato de bronca con el chofer por aquello  de ponerle dedo, por lo que mejor dejo las cosas tal y como están y ya  no molesto a la muchacha, quien por cierto se veía muy seria de su  semblante facial, cosa que también me hizo pensar en que a la mejor no  estaba de humor, por lo que ahí me desentendí del asunto pensando en la  máxima aquella que reza: Del 100 por ciento de tus problemas, el diez  por ciento es circunstancial e inevitable, pero el otro 90 por ciento  restante es por metiche, así que mejor ahí murió.
El de la ruta  Progreso 5 número 16 hace lo mismo que el de Jazmines: se queda un buen  rato a media cuadra como esperando pasaje o que le llegue su tiempo de  itinerario, la agente vial ya no se mira por ningún lado. Se arranca el  Progreso 5 y ahora le toca el turno de detenerse a media cuadra y  haciendo que se hagan bolas en el cruce de Hidalgo y Zacatecas las demás  unidades del STU y vehículos particulares; es el camión que trae el  número 068 al frente, pero a un lado trae las siglas URB seguidas del  número 444, y teniendo el resto de la calle Zacatecas libre hacia la  Lerdo, ahí se queda tal vez sin importarle que está detenido el tráfico  vehicular por su detención.
Vuelvo a pasar por dicha calle de  Zacatecas entre Hidalgo y Lerdo a eso de las 17:15 y ahora veo dos  motocicletas del Departamento de Tránsito y Vialidad, una es la número  19 en donde quien la tiene a cargo se encuentra muy entretenido con un  teléfono móvil, y la otra moto de tránsito es al parecer la número 86 o  23, no es posible determinar el número porque sobre el tanque está una  especie de chaqueta o impermeable que cubre el número de unidad, y quien  la conduce está enfrente platicando animadamente con el chofer de una  combi que, cuando terminan su plática se sube a su moto diciéndole a su  compañero que ya estuvo, y al arrancarse una persona les dice que si ya  estuvo por hoy y dicen que sí. Y el crucero bloqueado.
 
                     
                        